¡Tierra Trágame!

Participo en el concurso de Candela. Situaciones tierra trágame he vivido muchas, supongo que como todo el mundo, pero haciendo honor a mi blog voy a contar una ocurrida con mi hijo.

Mi hijo tenía 14 años, la edad del pavo, la cumbre de la edad del pavo. En esa edad lo de dar un "beso" a su madre le parecía lo más tonto, ya era mayor y con el beso de buenos días y el de buenas noches su madre  (osease yo)  estaba servida. También en esa edad empezó con los escrúpulos, casi todo le daba asco. Así que lo aproveché y le sobornaba para que me diera un beso amenazándole con darle yo un beso de "vaca" en cuanto estuviese distraído  (aclaro que siempre funcionaba y no tuve que lamerle jamás jajajja)

Juntando ambas cosas y lo picajosa que puedo llegar a ser a veces, se dio la situación "tierra trágame"

Salíamos de casa de los abuelos y al entrar en el ascensor para bajar los 11 pisos y uno más para llegar al garaje le pedí un beso. Un no como respuesta, le insistí, total que estamos solos en el ascensor, que no te ve nadie, dame un beso...un segundo no. Comencé  entonces con mi amenaza, ah pues ya sabes te daré uno de vaca. En ese momento me miró con resignación, decidido a darme el beso.

Y justo en el piso octavo y mientras se abría la puerta y entraba una señora muy  mayor, mi hijo me suelta:

Valeeeeeeeeee, te doy un beso, pero con lengua no ¿eh?

La señora mayor pero no sorda  nos miró, bajo la cabeza, nos dio la espalda  y bajó así los ocho pisos, mi hijo ni se dio cuenta de lo que pasaba  y yo me quedé sin beso y  no baje la cabeza porque no se iba a notar pero jamás bajar en ascensor se me hizo tan largo.



                                                        (Participo pero no quiero el premio)